El aprendizaje de Lolo
Te quiero compartir el maravilloso aprendizaje que me dejó Lolo después de haber hablado con él en consulta. Lolo es un ave que vive feliz en la naturaleza, es completamente libre de ir y venir a casa de Susy (su responsable por ahora) que, con amor, cada vez que la visita, le abre la ventana de su cuarto y él es libre de entrar y salir a su antojo.
Ella me buscó porque estas últimas semanas ha estado viviendo en su casa. Lolo tuvo un incidente con un perro que le mordió una de sus alitas y mientras se recupera, estará quedándose en su casa. El incidente no fue nada grave y en unos días con algo de reposo, estará como nuevo para poder volar una vez más con libertad.
¿Por qué te comparto esto?
Porque la lección que Lolo me dejó me pareció hermosa. Al preguntarle si quería regresar a la naturaleza y seguir volando libre yendo y viniendo con “todos los peligros” que la ciudad podía tener para él o si prefería quedarse a vivir con su humana Susy, a la que adora y que con tanto amor lo cuida. Su respuesta me dejó llena de amor, pero sobre todo de mucha reflexión.
Lolo me dijo que no hay mayor privilegio que poder tener libertad. No importa si en esa libertad pasan accidentes o si en algún momento su vida terminará por causa de algo externo como lo que le pasó con este perrito. Él disfruta completamente el poder ser libre, disfruta respirar el aire cálido de afuera, disfruta regresar a los árboles con su familia cada día y disfruta visitar con mucho amor a Susy cuando llega por su ventana siempre que quiere pasar tiempo con ella.
Él sabe que en unos días regresará a la naturaleza y mientras tanto está feliz de pasar tiempo de calidad con Susy a la que adora!
Lolo simplemente cree que no hay ninguna razón por la cual debería temer a ser libre, a vivir en su máximo amor, a disfrutar de la vida con todos los detalles y matices que ésta tiene. La libertad es lo más preciado y amoroso que podemos tener y sobre todo, lo que más debemos disfrutar.
¿Te das cuenta que cómo los humanos, con toda la libertad de la que disponemos, somos muchas veces todo menos libres?
Vivimos llenos de miedos y limitaciones que a veces hacen que no podamos vivir en nuestro máximo potencial y con nuestro corazón abierto al amor.
Los animales nos enseñan que siempre hay una manera de vivir más amorosa, más feliz y más libre. Solamente hay que aprender a confiar, a ver desde los ojos del agradecimiento, a tener certeza y a disfrutar de toda la libertad que esta vida nos da.
Todo lo que puse aquí es con el permiso de su responsable y la foto también es tomada por ella
¿Qué opinas tú?
Te abrazo con cariño,
Ana Paola